Hay cosas sobre un caracol que una persona decente y con dignidad jamás debería saber. Que son hermafroditas por ejemplo. Es decir producen tanto espermatozoides como óvulos, y aún cuando algunos pueden auto-fecundarse tienden a aparearse por parejas, algo que les toma toda una noche. O que viven entre 5 y 7 años en promedio. Tienen el pié en el estómago. Se mueven por una serie de contracciones musculares ondulatorias. Producen mucus para evitar la fricción y ayudarse en la locomoción, esto les permite pasar por superficies tan afiladas como un cuchillo. O que los pobres tardan una hora en recorrer 50 centímetros. No, alguien en su sano juicio máximo debería saber que un caracol sabe bien con salsa Italiana y champiñones. No mas.

Mi afición por los caracoles comenzó hace unos meses atrás, cuando ví uno por primera vez. Ya luego supe que mi nuevo barrio está poblado de caracoles.

Pero no te preocupes, no vamos a hablar de caracoles más de lo ya mencionado, así que puedes quitar tu dedo del botón de cerrar. Simplemente era a manera de bienvenida a este nuevo espacio: Mister Caracol.

Cada Martes tendremos una nueva historia, un texto para disfrutar. Te invito a ser parte de esta aventura, no solo a leer, sino también a dar tu opinión en cada historia y compartir con otros aquello que encuentren interesante, aquello que tenga algún impacto en tu vida. Emprendamos juntos esta aventura!

Pero… de que se tratará todo esto? Nos vemos este Martes. Hasta entonces.